sábado, junio 30, 2007
Cine: ¿DÓNDE ESTÁ EL PARAISO?
Trino Márquez: LOS GUASONES
Con abundantes citas de diversos pensadores, aunque sin mostrarse pedante, y con sólidos argumentos, el magistrado fue elaborando su discurso sobre la necesidad e importancia de que las sociedades cuenten con una Magistratura fuerte e independiente de las presiones que se desatan desde muchos vértices, para tratar de acoplar las decisiones judiciales a los intereses de los grupos y poderes constituidos. En algunos párrafos se refirió a los afanes de los dictadores de todas las latitudes por subordinar los tribunales y la justicia a sus propios fines. Insistió en que mientras más poder detentan los mandatarios, mayor es el nivel de control que la Magistratura debe ejercer sobre aquellos. Con respecto a RCTV indicó que si se hubiese realizado un referéndum el pueblo habría votado en contra del cierre. Algo similar, añadió, habría sucedido en Estados Unidos y España con relación a la participación de esos países en la guerra con Irak.
Los comentarios emitidos por el Vicepresidente, el Canciller y el Ministro de Relaciones Interiores, desde luego que teledirigidos desde Miraflores, indignan no tanto porque muestran estulticia de la más crasa, sino porque revelan el enorme desprecio que estos gobernantes sienten por la inteligencia de la gente. Garzón fue acusado por todos ellos de ser un payaso, marioneta del imperialismo norteamericano y de inmiscuirse en los asuntos internos del país, con lo cual habría violado el principio de la soberanía y la autodeterminación de los estados. Estas majaderías las repiten los altos funcionarios de un régimen que a los pocos días de haber cerrado arbitrariamente el canal de Bárcenas, trajo al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, para que le diera, en el propio territorio nacional, un espaldarazo a la medida más grave adoptada en la historia del país contra la libertad de expresión e información. Esos mismos personajes, encabezados por el Presidente de la República, aplaudieron a rabiar cuando Lula, en un acto de insólita alineación con las apetencias de Chávez (ampliamente criticado por el Senado brasileño), apoyó la disposición. Entonces, ¿hay intervencionismo cuando una personalidad de la jerarquía mundial de Baltazar Garzón asoma una crítica a una decisión estrictamente política y retaliativa, que además no siguió los procedimientos judiciales ordinarios; pero, en cambio, opera la “solidaridad revolucionaria” cuando dos presidentes extranjeros celebran los caprichos del caudillo venezolano? El uso de raseros tan desiguales para medir el mismo hecho muestra el grado de obsecuencia y fanatismo que la “revolución bonita” ha provocado en quienes cumplen funciones de gobierno.
La respuesta de la doctora Morales hay que revisarla desde otra perspectiva. Leyendo sus comentarios a uno le surge la siguiente pregunta: ¿habrá oído o leído completa la disertación del juez Garzón? De una reflexión tan amplia y enjundiosa, ¿por qué se dedicó solo a atacar esos parajes que le molestaron a Hugo Chávez, sin ni siquiera mencionar de pasada todos esos contenidos relacionados con la doctrina y principios del Derecho presentes en la exposición? Irritan las coléricas declaraciones de la presidenta del TSJ, en las que llamó “mercenario” a un juez que no sólo le dictó auto de detención a Augusto Pinochet, sino que además le declaró la guerra a ETA (y esta lo sentenció a muerte) y se enfrentó a Felipe González por el caso de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL), episodio que casi le cuesta el cargo al entonces Presidente del Gobierno español en el momento cumbre de su carrera política. ¿La doctora Morales conocerá la trayectoria de Baltazar Garzón?
Una de las características de las revoluciones comunistas es que carecen de toda autocrítica, salvo la socorrida “burocratización”, de la que echan mano cada vez que la ineficacia y la incompetencia generalizada las desborda. De vez en cuando aparece por allí el tema de la corrupción, y como saludo a la bandera los líderes señalan que serán “implacables” con ella. Por supuesto nunca aparece ningún culpable, al menos ninguno significativo dentro de la estructura de poder. Por lo demás, para los revolucionarios comunistas todos los sujetos críticos que no apoyan los desmanes ni exabruptos del Gobierno son agentes del imperialismo; en cambio, los sumisos y acomodaticios representan la encarnación del bien.
Si Garzón hubiese llegado al país a cantarle loas al gran conductor y a hablar del acierto que fue atropellar a los tres mil trabajadores de RCTV, como lo hizo Daniel Ortega, se habría convertido en ejemplo de la justicia del socialismo del siglo XXI. Pero como vino a defender valores por los que la Humanidad lucha desde hace siglos, como la libertad de expresión, la libertad de pensamiento, la pluralidad y la existencia de un Estado de Derecho firme frente a los autócratas, el régimen lo condenó. Los insultos recibidos por Baltasar Garzón de parte de los guasones del régimen constituyen el mejor elogio a su trayectoria y dignidad.
Luis Di Lion: CHÁVEZ Y LA IMAGEN ROTA
Letras: LA PLUVIOSA NOSTALGIA DE VICTORIA DE STEFANO
Novela de la nostalgia, Lluvia conforma un espacio abierto que atesora momentos, situaciones dramáticas, personajes, acciones y —sobre todo— pensamientos de un pasado indefinido unido a un presente que trascurre sain prisas pero con certezas. Reconozco que es uno de los mejores textos que me ha tocado leer en los últimos años.
LLUVIA, Victoria De Stefano, Editorial Candaya, Barcelona, mayo de 2006, 182 páginas.Gerver Torres: IMAGINACION COSTOSA... E INÚTIL
gerver@liderazgoyvision.org
Culinaria: COCINA VENEZOLANA DE AUTOR EN MARGARITA
Una bella casona de altos techos y hermosos jardines recibe a los comensales de la mano de un atento guía que los ubica en mesas al aire libre. Allí este amable anfitrión toma sus pedidos de aperitivos y trae platillos con pâté de foie y otras amenidades. Luego Alejandra propone un menú de degustación compuesto por platillos tradicionales venezolanos elaborados con técnicas contemporáneas, desde las entradas hasta los postres. El guía propone la armonía con los vinos.Cuando el pedido está listo, los comensales entran a la casa y se sienta a la mesa iluminada por candelabros.
Hace algunas noches probamos una degustación muy peculiar que abrió con una pira de ahuyama —antiguo plato venezolano rescatado del olvido por José Rafael Lovera— que reúne 17 ingredientes. Luego siguió un strudel de masa filo con relleno de cazón y coloreado con aceite de oliva onotado. Más tarde se presentó una polvorosa de camarones preparada con mero, cebolla. ajoporro, vino blanco y crema de leche, con un toque de parmesano. El plato más fuerte fue el cordero de romero y ajo, al estilo de pascuas. El vino que acompañó este condumio fue un mendocino malbec de la Colección Privada de Navarro Correas. Tres fueron los postres que cerraron la noche: el clásico negro en camisa, la deliciosa magia blanca, que no es otra cosa que un bienmesabe hecho con guanábana en vez de coco y sin ron, y una tropicalísima mousse de mango. Y un rico café. Para finalizar, el Rum Orange de Santa Tersa. ¿Qué más se puede pedir?
Alta calidad de cocina, muy buena atención y un ambiente elegante y muy venezolano son los ingredientes de esta fórmula de placer de esta peculiar casa de comidas conducida por una francesa —Sophie— y una venezolana —Alejandra— en franca armonía. ¿Los precios? Más que razonables. La próxima vez que vayan a Margarita hagan un alto en Las Brisas.
LAS BRISAS. Cocina venezolana de autor. Calle Fraternidad, quinta Las Brisas, Los Robles. Teléfono: 0295 267.1516. Isla de Margarita. www.spalasbrisas.com.
lunes, junio 25, 2007
Menú 25-06-07
Los invitamos a leer la nueva edición de Ideas de Babel. Volvemos al tema de la rebelión que no cesa y que cada día crece frente a los caprichos de un hombre cada vez más solitario..
Trino Márquez se refiere a la realización de la Copa América en una Venezuela que se reconstituye ante el chavismo. Felipe Benites escribe sobre la necesidad de defender la actual Constitución antes de pasar a su reforma, como lo plantea el Ejecutivo y el Parlamento chavista. Gerver Torres analiza la incapacidad del Gobierno para poner en práctica el necesario ajuste fiscal que exige la economía.
También escribimos sobre Cuando amas debes partir, la más reciente novela de Eloi Yagüe Jarque, y del film Dulce venganza, del debutante David Slade, que replantea el tema de la pedofilia y los trastornos de conducta en la sociedad de hoy. Y celebramos los 12 años de El Ucabista, el periódico de la Universidad Católica Andrés Bello.
No se olviden de visitar también El Blog de Alfonso Molina en www.noticierodigital.com y el Blog Crítico en www.grancine.net.
Saludos.
Alfonso
domingo, junio 24, 2007
Política ficción: LA REBELIÓN QUE NO CESA
Hoy tenemos dos Venezuelas separadas por el capricho de un hombre, en la mayor demostración de absolutismo. Un caudillo que en vez de conciliar busca la confrontación con el más claro lenguaje militarista. Un gobernante sordo ante las exigencias de un pueblo. Un hombre solitario que ya no goza de la aprobación de quienes cifraron sus esperanzas en él. Tampoco de la Unión Europea ni de los miembros del Mercosur. Sin él la revolución se la llevará el viento. Algún día Chávez será eso: lo que el viento se llevó.
Trino Márquez: LA COPA ROJA
Ahora bien, al lado de todos estos aspectos positivos, no es posible dejar de indignarse con el sectarismo, la petulancia y el desmedido culto a la personalidad con los que el Gobierno revolucionario ha rodeado la realización de la cita deportiva. Ante la enorme trascendencia de la justa, la mayoría de los funcionarios, desde los más encumbrados hasta los más subalternos, han emprendido un vuelo de gallineta rasante, como habría dicho Rómulo Betancourt. El Presidente de la República, los gobernadores y alcaldes chavistas, y los ministros no quieren asumir que el país está colocado frente a la posibilidad de que los distintos sectores enfrentados se reconcilien y unifiquen en torno a un sueño común, y que tengamos una tregua que permita que toda la nación disfrute de la esférica rodando por el césped, tal como ocurre cada cuatro años con los mundiales de fútbol, que a pesar de llevarse a cabo en otras latitudes, los compatriotas los viven como propios.
Sólo en los regímenes totalitarios más cerrados las competencias deportivas se utilizan obscenamente como arma política. Este fue el caso de la Alemania nazi cuando Hitler pretendió manipular la Olimpíada de 1936 para demostrar la supuesta superioridad de la raza aria. Con todo, de ese manejo burdo se protegen hasta las dictaduras más crueles. En 1978 cuando el mundial de fútbol se efectuó en Argentina, el gobierno de Videla se cuidó de que el certamen pareciera un esfuerzo de todos los argentinos, y no de la camarilla que lo rodeaba. Desde luego que la oposición, por aquel tiempo silenciada, sabía que los jerarcas militares utilizarían el torneo para dar internacionalmente la sensación de apertura política y prosperidad que necesitaban para lavar el rostro de esa tiranía tan despiadada. Pero el Gobierno no secuestró el evento.
Este no es el caso de Venezuela. Aquí hasta las entradas están confiscadas por el sectarismo bolivariano. Los estudiantes han tenido que incluir entre sus reclamos al Gobierno la exigencia por tickets. Estos no se consiguen ni por error. Toda la propaganda de la Copa ha estado teñida de rojo. No hay espacio publicitario en vallas, periódicos o televisión donde el rojo encendido no encandile. Hasta por la radio pareciera esparcirse ese color. Cada gobernador o alcalde utiliza la ocasión para masajearse el ego y mostrarse como favorito del gran jefe, Hugo Chávez. No existe el menor recato ni vergüenza. Todos han perdido la compostura. Los gobernadores de Táchira, Mérida, Lara, Anzoátegui, Monagas han inundado las capitales de sus estados con propaganda chavista. El alcalde Di Martino, en Maracaibo, tapizó la ciudad con propaganda donde ensalza sus propias virtudes y las de Chávez, su héroe epónimo, pero minimiza todo lo relacionado con la Copa. De este exabrupto dio cuenta Claudio Nazca en una exquisita crónica. Los abusos que se están cometiendo son de tal magnitud, que un organismo tan poderoso como la FIFA debería pronunciarse enérgicamente para que el Gobierno elimine el tono proselitista y abiertamente político partidista que le ha impreso al torneo de fútbol más importante y antiguo del continente.
La relación entre política y deporte ha sido objeto de enjundiosos estudios. Desde antaño se sabe que los gobiernos, incluidos los democráticos de vieja prosapia, se valen de los atletas para ocultar debilidades y errores, y para proyectar su pretendida grandeza. No obstante, lo que estamos presenciando en Venezuela es una deformación grotesca de un caudillo y una casta política arrogante, desconsiderada y excluyente que pretende manejar el país a su antojo. Esta claque, así como no cree en la independencia y el equilibrio entre los poderes públicos, ni les da importancia a las instituciones arbitrales, tampoco considera que puedan y deban existir espacios neutrales, como las competencias deportivas internacionales, donde la gente se reconozca en cuanto parte de una entidad mayor que es la Nación.
Si esto está ocurriendo antes de la realización del torneo y sin que la Vino Tinto haya mandado el primer balón a la red, debemos imaginarnos cómo será la manipulación en el caso de que el equipo nacional logre una participación destacada. Todo aparecerá como obra del genial estratega, del ser omnisciente que dirige los destinos del país desde Miraflores, en el más ortodoxo estilo de la Korea del Norte de Kim Il Sung y Kim Jon Il.
tmarquez@cantv.net
Letras: ¿POR QUÉ ELOI YAGÜE QUIERE MATAR A FERNANDO CASTELMAR?
Las angustias de Fernando Castelmar se desprenden desde Las alfombras gastadas del Grand Hotel Venezuela, publicada en 1999, debut en el campo novelístico de este escritor venezolano —nacido en la Valencia española en 1957 y trasladado a Caracas cuando era un niño— que ha descollado con sus cuentos, especialmente La inconveniencia de servir a dos patronos, que le valió el premio Juan Rulfo, otorgado por Radio Francia Internacional. Su Castelmar es un ex militante de izquierda, vinculado con la insurrección de los años sesenta en Venezuela, que ha devenido en desesperanzado periodista del más importante diario de Venezuela. Un hombre que "ha dormido durante 20 años" hasta que el Caracazo de febrero de 1989 lo despierta bruscamente, de nuevo, ante la muerte, la miseria y la injusticia social. Castelmar practica la autoagresión cotidiana, ejerce el cinismo de los perdedores que se saben perdedores, no el de los ilusos que se creen vencedores, como su amigo W.C., punto de quiebre de la amistad, la ideología y la trama de la historia. Castelmar es un hombre que ha perdido la voluntad y ha engendrado el odio, el resentimiento, el deseo de venganza. Y de pronto, clic, la cámara se dispara y se transforma la anécdota.
Aunque se pretende que el núcleo dramático del relato sea el triángulo amoroso entre Castelmar, periodista, W.C., jefe de Redacción de La República, y Aída, bella y oportunista pasante con 20 años menos, en realidad —desde mi perspectiva— el único personaje desarrollado es el de Castelmar. Bien vistos, W.C. y Aída son sólo dos referencias humanas que justifican el desarrollo de la trama. Es, más bien, la historia del desencanto de un hombre que ha cruzado sus cuarenta años, del llanto prolongado de alguien que no supo, no quiso, no logró colarse en el campo de los "triunfadores", del saberse fuera de este mundo que ha marcado la conducta de los desplazados.
Por eso, también, la referencia al Caracazo del 27 F, termina siendo anecdótica, casi una justificación para exponer un punto de vista político. Ese despertar brusco ante la realidad es la constatación de un fracaso. Del país, de aquella democracia erosionada, de la revolución soñada, del propio periodista. Pero el móvil para asesinar a otro ser humano no es político, ni siquiera ideológico. Son el oportunismo de W. C., la desvergüenza de Aída y, ahora sí, la mezquindad del propio Castelmar los factores que mueven la trama. En el fondo, a Castelmar le importa una pamplina frita los ideales de la revolución soñada en su adolescencia. Como todos los moralistas revolucionarios, termina convirtiéndose en el Tartufo de marras.
Cabría preguntarse, después de la muerte moral de Castelmar, tras asumir la vida y los valores que tanto había odiado, si podría ser el personaje de una nueva novela ambientada en estos nueves años de chavismo. Tendría el contexto histórico y político adecuado —corrupción, abuso de poder, pacto con los factores económicos, oportunismo— para elaborar una nueva narración negra, donde lo importante no es que el crimen de ley tenga castigo sino que exponga los laberintos de la corrupción del poder.
CUANDO AMAS DEBES PARTIR, de Eloi Yagüe Jarque. Seix Barral Biblioteca Breve, Editorial Planeta Venezolana, 2006. Premio Nacional de Narrativa Salvador Garmendia, 317 páginas.
Cine: PARA CAZAR AL CAZADOR
Dulce venganza narra una historia llena de equívocos y señales aparentes que involucra a Hayley Stark, una chica extremadamente joven y encantadora que entra en contacto, vía Internet, con Jeff Kohlver, un guapo fotógrafo de 32 años que busca emociones fuertes. A pesar de la diferencia de edad, comienza un coqueteo cibernético que conduce a una cita real, física, en un café, que a su vez conduce al apartamento de Jeff con la promesa de una sesión de fotos que, tras unos vodkas, podría convertirse en una aventura sexual. Una relación entre un adulto y una adolescente —una relación condenada por la ley— en la que el hombre debe dominar a la chica. Pero sucede todo al revés. La chica domina al hombre. Lo amarra a una silla y comienza a acosarlo como pedófilo pues ella está segura de que no es la primera vez que Jeff cita a una menor de edad. El cazador cazado.
El film de Slade va de sorpresa en sorpresa, mostrando facetas ocultas en las conductas humanas. No sólo plantea esta inversión del esquema tradicional sino que descubre nuevos vínculos emocionales entre uno y otro personajes. Dulce venganza persigue la perturbación, además, del público. Coloca la esencia de un tema discutido como la pedofilia y la pornografía juvenil en el campo de las actitudes más íntimas. De pronto, Slade no sólo está exponiendo los riesgos de la pedofilia sino también los del sadomasoquismo. Jeff y Hayley se revelan como pequeños infiernos individuales y arrastran al espectador a sus aquelarres. La Caperuicta Roja ha encontrado a su Lobo Feroz pero en vez de preguntarle por qué tiene los colmillos tan grande se apresta a mostrarle sus propios colmillos, definitivamente más peligrosos y letales.
La narración descansa sobre un guión muy bien urdido, una dirección muy cuidadosa de los detalles y, muy especialmente, sobre las actuaciones de Ellen Page, como Hayley, y Patrick Wilson, como Jeff. La mayor parte del film se fundamenta en la interacción de sus personajes y en la capacidad de desnudarse íntimamente para mostrar sus miserias. Film inquietante que ofrece mucho más de lo que promete.
viernes, junio 22, 2007
Letras: LOS 12 AÑOS DE "EL UCABISTA"
Como es costumbre, este año El Ucabista celebrará su aniversario con una premiere de cine, además de otras novedades. El jueves 21 se realizó el evento Crónicas de Colombia, con la participación del profesor de la Ucab e Individuo de Número de la Academia Venezolana de la Lengua, Francisco Javier Pérez, y la jefa de información de Tal Cual, Maye Primera; este evento también conmemora los 80 años de Gabriel García Márquez y los 40 años de su obra Cien Años de Soledad. El lunes 25, a las 12 m, el grupo de hip hop 4to Poder ofrecerá un concierto en la feria de la Ucab para todos los estudiantes y se presentará también nuestro periódico de mayo-junio, el cual incluye un encartado especial de educación de dieciséis páginas a full color que trata de manera especial el tema del proyecto de la Ley de Educación en Venezuela.
Doce años de experiencia y éxitos en el periodismo universitario revelan la constancia y la dedicación que caracteriza el trabajo de los estudiantes y profesionales que laboran en El Ucabistahoy profesionales-han formado parte del equipo que elabora el periódico desde su fundación.
Felipe Benites: DENTRO DE LA CONSTITUCIÓN TODO…FUERA DE ELLA NADA
Ya a estas alturas que duda cabe que el “pistoneo” mostrado en abril por dicho motor ha devenido en considerable avería que —de no ser atendida con brevedad y pericia— podría trastocar en vulgar fundición de máquina. A mí también me ha sucedido que en raudo viaje a donde creía que la iba a pasar de lujo, fallara el perol. Pero ojo, ni de lejos sugería que ello estaba contemplado y que dada la situación, acamparía de lo más sabroso a orilla de carretera.
Lo cierto es que a la iniciativa presidencial el pueblo le percibió el tufillo autoritario y ahora pareciera que le hiede a pretensión totalitaria. Y es que la forma y extensión que adquirió la movilización estudiantil posterior al 27 de mayo —y que amenaza por mantenerse un tiempito más— fue una especie de jamaqueo o alarma colectiva en tal dirección. Acontecimientos estos que comenzaron por un tema, en cierto modo de derecho privado, como lo de RCTV, y que ya van por el hecho absolutamente público y político de la reconciliación nacional; transitando por cuestiones algo abstractas como la defensa de la democracia, la libertad de expresión y los derechos civiles, pero también pisando en asuntos más terrenales como la autonomía universitaria y un largo etcétera que con el tiempo de seguro se incorporarán al rosario.
El saldo es que la variedad y la asertividad de demandas hasta hoy formuladas por el movimiento estudiantil, además de legitimar la permanencia y expansión de sus acciones en tiempo y espacio, han dado pie a que los “hijos de gobierno” y su taita —harto confundidos— le ataquen en cuanto debate se halla efectuado con el “san benito” del proyecto de país que ellos proponen. Indiscutiblemente esta línea de confrontación obedece a un planteamiento estratégico de jerarquía superior, puesto que ni los propios estudiantes pro gobierno han formulado proyecto de país alguno, sino que llegaron al mundo político con el mandado hecho, con su arepita ideológica bajo el brazo: un arcaico proyecto de sociedad elaborado por y para el siglo XIX.
Sin embargo, lo significativo, lo central y también lo contraproducente de la oficialista postura es algo que —por ignorancia y consecuente falta de uso— los jóvenes gobierneros han dejado olvidado en el fondo de sus legendarios mapires. Y esto nos conduce a la respuesta que en algún momento verbalizarán los estudiantes libertarios. Una que está en absoluta concordancia con lo que hasta ahora se ha demostrado en sus pacíficas y muy legales acciones. Con ello producirán aporreo y considerables magulladuras a un régimen que, paradójicamente, incubó la criatura que les hará frente.
Me refiero a que los jóvenes disidentes también vinieron al mundo con su arepota política bajo el brazo. Su pasado es el presente y ello les hace acreedores de un específico proyecto de país, no precisamente para bautizarlo ante el gobierno y su juvenil representación, sino para defenderlo de ellos toda vez que el mismo, aunque inobservado y bajo fuerte amenaza, sigue aun vigente. Pues si: el proyecto de país que los jóvenes están defendiendo no es otro que el está plasmado en
Ahora bien, para que quede claro que ese es el proyecto de país puesto en juego, permítanme citar ínfima parte de su articulado —no hace falta buscar mucho tan sólo abra el librito azul, cierre los ojos y apunte con el dedo para que tropiece con importantes artículos flagrantemente ignorados— y así ilustrar lo que hoy los muchachos —y mañana la población en pleno— saldrán a defender:
“Art. 187: Corresponde a
“Art. 201: Los diputados o diputadas son representantes del pueblo y de los Estados en su conjunto, no sujetos o sujetas a mandatos ni instrucciones, sino solo a su conciencia. Su voto en
“Art 102: …La educación es un servicio público y está fundamentada en el respeto a todas las corrientes de pensamiento, con la finalidad de desarrollar el potencial creativo de cada ser humano y el pleno ejercicio de su personalidad en una sociedad democrática…” Ojo con una educación en valores socialistas o con exclusividades de cualquier otra naturaleza.
“Art. 16:…La división político territorial será regulada por ley orgánica que garantice la autonomía municipal y la descentralización políticoadministrativa. Dicha ley podrá disponer la creación de territorios federales en determinadas áreas de los Estados, cuya vigencia queda supeditada a la realización de un referendo aprobatorio en la entidad respectiva…” La “geometría del poder” está definida en la nación atendiendo a características y dinámicas sociopolíticas de profundas raigambres culturales y condicionantes históricos, su modificación está sujeta a consulta popular. Ojo con la promulgación de territorios socialistas sin la discusión y aprobación del pueblo.
¿No les parece que estos motores están como pasando aceite?
Gerver Torres: ¿AJUSTE FISCAL O FISCALES QUE AJUSTEN?
lunes, junio 18, 2007
Menú 18-06-07
Los invitamos a leer l,a nueva edición de Ideas de Babel. Las firmas de Antonio Sánchez García, Trino Márquez, Roger Santodomingo, Carlota Salazar y la opinión del Grupo La Colina le brindan solidez a distintos temas de actualidad.
También presentamos nuestras opiniones sobre el desabastecimiento alimentario, la nueva película de Ken Loach —El viento que acaricia el prado— y la cocina catalana de vanguardia que se presentará esta semana en Yantar.
No se olviden de visitar también El Blog de Alfonso Molina en www.noticierodigital.com y el Blog Crítico en www.grancine.net.
Saludos.
Alfonso
sábado, junio 16, 2007
Política ficción: ¿DÓNDE ESTÁ LA LECHE?
De esta apreciación se pone de bulto que tenemos un serio problema de gestión —incapacidad gerencial, corrupción, clientelismo político, ignorancia en la materia— pero lo más grave es que tenemos un problema de modelo —estatismo, autoritarismo, exclusión del sector privado— y ambos tienden a agravarse cada día. Chávez ya lo dijo: "expropiamos las empresas". No lo dudo. Lo que no sé es cómo podrá resolver, por esta vía, el problema del desabastecimiento. El Ejecutivo importará más carne de Brasil y más leche de más allá y más harina de maíz de más acá. Pero seguirá habiendo desabastecimiento, se incrementará la corrupción y se agotará el tiempo de la paciencia de los ciudadanos.
En las últimas semanas, los estudiantes y la sociedad civil han estado luchando por conceptos fundamentales —libertad de expresión, democracia, pluralismo— pero ahora asoma la nariz una lucha mucho más concreta: por la nutrición de los niños y la familia. Luego vendrá la protesta por la incapacidad del ministro Carreño en controlar la delincuencia. Y por el desempleo y la informalidad laboral. Y por el estado lastimoso del sistema de salud y el incremento de la mortalidad infantil. Y por...
Antonio Sánchez García: GRAMSCI Y MUSSOLLINI EN MIRAFLORES
De allí que el asesor italiano —¿Antonio Negri?— que ha puesto las ideas del sardo en el escritorio de Miraflores no tenga la menor idea del caldo que se cuece en Venezuela: golpismo puro, militarismo puro, autocracia pura, caudillismo puro. Ingredientes muchísimo más cercanos al pensamiento, las ideas y el quehacer de Benito Mussolini que de Antonio Gramsci. Así el castrismo provea del know how represivo y el marxismo-leninismo la médula totalitaria para la torta bolivariana. ¿Gramsci legitimando el cierre de medios y la persecución a artistas, intelectuales y estudiantes que sacude a la sociedad venezolana? Puro non sens.
2
En cuanto al marxismo gramsciano, nunca está demás aclarar algunas cosas. Porque tampoco es que Gramsci sea la versión angelical, rosada del golpismo bolchevique. Gramsci fue marxista de la misma manera que Lenin: acuciado por sus propias determinaciones. Apenas realizado el asalto al Palacio de Invierno y la violenta toma del poder por los bolcheviques en octubre de 1917, un acto de consecuencias universales apenas entrevisto por sus contemporáneos, Antonio Gramsci, joven líder de los socialistas revolucionarios turineses, publicó el 5 de enero de 1918 en Il Grido del Popolo su artículo La revolución contra "El Capital". Ya hacía referencia en él a un hecho determinante de su propio quehacer intelectual: la revolución rusa había tenido lugar a contracorriente de los pronósticos marxistas. Lo que le importaba un rábano. La revolución podía y debía cumplirse sin importar las enseñanzas marxianas: el problema crucial era tomar el poder –si se podía- y echar a andar la transformación revolucionaria de la sociedad. En cualquier tiempo y lugar. Todo lo demás podía quedar relegado a los manuales, absolutamente inútiles, como los de la profesora Marta Harnecker.
Si Gramsci se distancia del putchismo bolchevique no es por razones morales. Es por elemental cálculo político. En la Europa industrializada, con sociedades civiles complejas y articuladas, para hacer la revolución socialista no basta con dar un golpe de Estado, como en Rusia. O como en Venezuela, valgan las diferencias. Hay que conquistar a la sociedad civil. Asunto infinitamente más arduo, difícil y complejo que asaltar el Palacio de Invierno con una tropa de desesperados. O ganar elecciones montados en parafernalias electrónicas y fraudulentas. Del estudio de la naturaleza de la sociedad rusa —que conocerá personalmente cuando viva en la Unión Soviética como delegado del PCI en la III Internacional— se desprenderá su genial intuición que desarrollará luego en sus Cuaderni del Carcere.* Y de la aplicación de las categorías claves de Estado, Sociedad Civil y Familia con que Hegel desarrolla su anatomía del Estado y del derecho en la sociedad burguesa.** Se trata de su profunda y genial comprensión de la naturaleza de los sistemas de dominación en tanto ecuación hegemónica: consenso (ideas y creencias dominantes) blindado de coerción (represión estatal). O Estado más sociedad civil. Ecuación dominante que recibirá el nombre de hegemonía y que tendrá muy importantes efectos en su proyecto estratégico y táctico. Hasta venir a dar cincuenta años después en el eurocomunismo, la postrera y frustrada ilusión del marxismo europeo antes del naufragio final.
No sabía cuán identificado estaba con la percepción que Marx tenía de sí propio. En carta que enviara en 1877 a la redacción de la revista rusa Otiechsviennie zapiski protesta enérgicamente contra aquel crítico que ha pretendido “a todo trance convertir mi esbozo histórico sobre los orígenes del capitalismo en la Europa Occidental en una teoría filosófica-histórica sobre la trayectoria general a que se hallan sometidos fatalmente todos los pueblos, cualesquiera sean las circunstancias históricas que en ellos concurran…” Y agrega en ese su clásico estilo lapidario, como pensando en sus más fieles seguidores de hoy: “esto es hacerme demasiado honor y, al mismo tiempo, demasiado escarnio”. Pudo hacer suya la frase que el joven Gramsci escribiría cuarenta años más tarde y dirigirla al marxismo impenitente que aún hoy, en pleno siglo XXI, apuesta a la dictadura del proletariado contra toda consideración histórica objetiva: tú sola, estupidez, eres eterna.
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Mientras las masas aclamaban el nombre de Mussolini por toda Italia, aquellos que compartían la prisión en que aherrojara a Gramsci en Turi ni siquiera podían deletrear su nombre. Lo llamaban Gramasci, Granusci, Grámisci, Gránisci, Gramásci y hasta Garamáscon. Y cuando aquellos que lo conocían de nombre y lo admiraban como diputado y dirigente comunista se enfrentaban por primera vez a su menuda, contrahecha y triste figura, se negaban a aceptar que ese ser frágil, atribulado y desvalido fuera el cíclope que tanto admiraban. Para ellos, Gramsci era un titán, un héroe. No esa derrengada, canija y afligida figura.
Cine: LA IRLANDA DIVIDIDA SEGÚN KEN LOACH
Recuerdo que la decisión del jurado no fue aplaudida por la crítica reunida en el célebre y consagrador certamen francés y se le consideró más un reconocimiento a su extensa trayectoria. Con más de 30 largometrajes en su haber, Loach había coqueteado con el máximo premio de Cannes desde que en 1971 presentó al mundo su Family life, film extraordinario que definió su estilo de cine: la crítica a la injusticia ejercida desde el poder y el compromiso social con los desposeídos. Entonces firmaba sus películas como Kenneth Loach y era notoria su militancia troskista. Su trayectoria se haya respaldada por filmes importantes como Riff Raff, Ladybird, Ladybird, La canción de Carla y Tierra y libertad. Con todo, su filmografía es aún poco conocida en Venezuela. Cinematográfica Blancica se arriesgó a traer El viento que acaricia el prado que actualmente busca la opinión del público.
Socialista consecuente, Loach ha rehuido las posturas del lamentable realismo socialista y ha desarrollado una filmografía que no busca la comodidad conceptual. No hace cine de propaganda sino de interpretación histórica desde su perspectiva ideológica. El viento que acaricia el prado se sirve de dos hermanos que en 1920 participan en la rebelión guerrillera contra la ocupación británica de su patria. Un año antes se había votado democráticamente la constitución de la República de Irlanda y se había creado el Ejército Republicano Irlandés, hechos que no fueron respetado por Gran Bretaña. Damien y Teddy O'Donnovan se entregan a su lucha como hermanos y como irlandeses hasta que ven la oportunidad de transar la paz con el ejército británico. Se firma, entonces, el tratado de 1920, según el cual el país se divide en la República de Irlanda, capital Dublín, e Irlanda del Norte, capital Belfast, integrada al Reino Unido. Damien está en contra, Teddy a favor. De una guerra de liberación, Irlanda pasó a una guerra civil, una guerra entre hermanos. Eso es historia. Y sabemos las consecuencias que ha tenido en términos de muerte, terror y dolor.
A sus 71 años, Loach no busca la experimentación sino la narrativa eficiente. Propone —ni más ni menos— que la historia de Irlanda sería diferente si en aquella fecha se hubiese declarado socialista, lo cual es un avatar que pertenece al campo de lo especulativo, pero no por ello es desdeñable. Ciertamente, hubo fuerzas socialistas que alentadas por el triunfo de la revolución bolchevique en la vieja Rusia, en 1917, proponían dos años después una república irlandesa socialista, frontalmente separada del capitalismo del Reino Unido. Esa fue la tesis que impulsaron los socialistas irlandeses y apoyaron años después los troskistas británicos. Un inglés, Loach, habla de Irlanda desde la perspectiva del internacionalismo proletario, el mismo que le sirvió para filmar Tierra y libertad, donde expuso las contradicciones de la izquierda española durante la Guerra Civil.
Un guión sin fisuras, una puesta en escena muy correcta, unas actuaciones extremadamente profesionales y un tema que hoy, casi un siglo después, sigue inquietándonos, son las principales virtudes del film. Lo que me fastidia del film es que, para mí, es perfectamente predecible. Tal vez porque conozco la historia de Irlanda, quizá porque he visto muchas películas de Loach. Desde el principio intuí el final. Creo que era inevitable.
EL VIENTO QUE ACARICIA EL PRADO ("The wind that shakes the barley"), Irlanda, Inglaterra, Alemania, Italia y España, 2006. Direcciön: Ken Loach. Guión: Paul Laverty. Producción: Rebecca O'Brien. Fotografía: Barry Ackroyd. Montaje: Jonathan Morris. Música: George Fenton. Elenco: Cillian Murphy, Pádraic Delaney, Liam Cunningham, Orla Fitzgerald y Mary O'Riordan, entre otros. Distribución: Cinematográfica Blancica.